lunes, octubre 03, 2011

UK Journey

Voy a utilizar mi blog para actualizar periodicamente sobre mi estancia en el Reino Unido. Lo hare del mismo modo que cuando estuve en Boston, es decir, dando acceso a la gente que me lo solicite con el fin de no hacer publico el contenido de los posts, no viendome obligado a adecuar el contenido y registro (pudiendo asi explicar todo de una forma natural).

Todo lo que teneis que hacer es enviarme la direccion de email con la que vais a entrar al blog (lo podeis hacer bien por email o bien dejando el comentario con vuestra direccion sobre este mismo post). Os dare acceso y podreis ir entrando para leer la cronica.

http://vicksukjourney.blogspot.com

viernes, febrero 04, 2011

Somos parte del problema

Costa de Marfil es, sin lugar a dudas, el país con más recursos de África Occidental. Independizado de Francia el 7 de agosto de 1960, es el mayor productor de cacao a nivel mundial y uno de los mayores exportadores de café y caña de azúcar.

A ello se le suma su clima excepcional, con abundantes lluvias durante gran parte del año, que le confirieren una vegetación y geografía envidiables.

No obstante, lo que hace verdaderamente rica a esta nación es su gente. El país sonríe a través de millones de niños que han nacido en condiciones adversas, sufriendo una guerra civil, y que crecen fortalecidos gracias a la tenacidad de sus padres, que han luchado para ofrecer a sus hijos lo que algunos de ellos pudieron vivir hace tres décadas: el sueño de un país próspero con un futuro brillante por delante.

Costa de Marfil ha sido, en estas fechas tan señaladas que hemos pasado, un país que llora. Lo hace porque su gente está cansada de la corrupción, de los que les dicen representar, y del modo en que estos les utilizan para conseguir sus fines. Llora por ser un país artificialmente dividido, con un norte armado por aquellos que mantienen sus intereses económicos, y con un sur corrompido bajo los ojos de las embajadas de todo el mundo. Un país de peajes que, desde hace unas semanas, los cuenta por partida doble. Ahora ya tienen un par de presidentes dispuestos a exprimir a su pueblo.

Llevamos años realizando una labor humanitaria en este país, intentando aportar nuestro granito de arena una vez al año, durante el periodo estival, y hemos sido testigos de esa impotencia, de un país que quiere crecer y que tiene la capacidad para hacerlo, pero que está atado por el egoísmo y la pequeñez de corazón de unos pocos, que se benefician del trabajo de un pueblo con un corazón enorme.

Si no somos parte de la solución, somos parte del problema. Ya han pasado muchas décadas desde el proceso de descolonización africano y parece evidente que el resto de los continentes, en especial la Europa colonizadora, no sólo son incapaces de sumar, sino que con mucha frecuencia únicamente se involucran para restar.

O decidimos comenzar a colaborar sin pedir nada a cambio, como hacen esos miles de misioneros que dan su vida desde hace décadas por el pueblo marfileño, o mejor que nos aislemos en nuestro mundo cortoplacista e intrascendente y dejemos que ellos dibujen su futuro.

Eso sí, si optamos por esta última opción, olvidémonos de seguir regalando bombones.

Carta publicada en La Vanguardia / Domingo 9 de Enero de 2011
Carta publicada en El Periódico / Sábado 22 de Enero de 2011